La arquitectura de ladrillo y su construcción en la ciudad de Zamora (1888-1931)

Resumen

En el último cuarto del siglo XIX, la ciudad de Zamora vivió un proceso de revitalización arquitectónica en la que el ladrillo se instauró como elemento constructivo y ornamental por excelencia, sustituyendo a la sempiterna piedra. En esta investigación se dan a conocer los motivos que indujeron a emplear el ladrillo en las fachadas de los inmuebles, los tipos y modelos que se fabricaron, las técnicas constructivas así como la variedad de diseños y los diferentes estilos arquitectónicos que derivaron de ellos, en los que este material era el protagonista. Estudiando los muros existentes y los datos extraídos de los documentos de los proyectos originales, se concluye que, en general, las fachadas estaban compuestas por dos hojas de ladrillo. De ellas, la exterior era de ladrillo prensado al descubierto con un aparejo más o menos ordenado, trasdosándose al interior con ladrillo ordinario, que se reorganizaba para conseguir una fuerte traba. En este sentido, se demuestra que el uso de uno u otro tipo obedecía a la necesidad de economizar en la obras ya que el precio del primero era muy superior al que tenía el segundo. No obstante, y a pesar de que en gran parte del territorio español imperaba el estilo Neomudéjar, con el aparejo a tizones como seña de identidad, los arquitectos afincados en la capital mostraron una gran libertad en la ejecución de las fábricas de ladrillo, utilizando y adaptando los rasgos propios de esta corriente historicistas, pero sin emplear la traba de tizones para conseguir las figuras ornamentales. La tesis incorpora, además, un catálogo con 58 fichas, correspondientes a los edificios cuyas fachadas muestran ladrillos al descubierto. Cada una incluye un estudio pormenorizado de las fachadas y los ladrillos, así como abundante documentación, con fotografías de los proyectos originales y del estado actual.