Efecto de la harina de Tenebrio molitor y Acheta domesticus sobre los rendimientos productivos y la calidad de carne de pollos de engorde de crecimiento lento
- Isabel Revilla Martín Director
- Carlos Palacios Riocerezo Co-director
Defence university: Universidad de Salamanca
Fecha de defensa: 11 July 2024
- José Alfonso Abecia Martínez Chair
- Ana María Vivar Quintana Secretary
- Manuel González Ronquillo Committee member
Type: Thesis
Abstract
La producción avícola es una gran fuente de proteína a la hora de satisfacer el aumento del consumo mundial de carne debido al aumento poblacional y los cambios alimentarios. El aumento de la demanda de carne conlleva una intensificación de la ganadería, en detrimento de la producción extensiva en la que predomina la crianza al aire libre en amplios espacios y con una menor dependencia de recursos externos. Actualmente, la producción de carne de ave se realiza mayoritariamente en sistemas intensivos estandarizados. Por suerte, cada vez existe un mayor interés por la crianza en sistemas alternativos, en los que prima la sostenibilidad ambiental y el bienestar animal. Para adaptarse a estos sistemas se requiere el uso de razas o estirpes de crecimiento lento, en contraposición a las estirpes de rápido crecimiento (broilers) de los sistemas intensivos. Estas estirpes presentan un ciclo de producción más largo y una mayor rusticidad y poder de adaptación a la crianza al aire libre. La alimentación es un aspecto fundamental en cualquier ganadería, tanto en el bienestar animal como en los resultados productivos. Las fuentes proteicas en la alimentación avícola desempeñan un papel crucial en los rendimientos de los animales, siendo los componentes más limitantes y costosos de las granjas. La harina de soja es la fuente proteica más empleada, pero sus altos precios unidos a los graves problemas ambientales ligados a su producción están provocando la necesidad de buscar nuevas fuentes proteicas para incluir en las raciones avícolas. Los insectos se proponen como una fuente alternativa y sostenible para aportar a las dietas debido a su alto nivel de proteína, con bajos requisitos de tierra y agua para su producción, ciclos cortos de producción y baja huella ecológica. Su uso en aves de corral está ganando interés comercial desde la reciente regulación de la UE que ha permitido la alimentación con insectos en las dietas de monogástricos. La aceptabilidad de la carne de ave está influenciada por su calidad. La nutrición de dichas aves tiene un gran impacto en el desarrollo de los animales, así como en las cualidades de en su carne. Además, las estirpes de crecimiento lento presentan características diferentes frente a a las estirpes convencionales, tanto en sus rendimientos como en la calidad de carne. En este escenario, esta Tesis Doctoral propone evaluar el efecto de la sustitución de la harina de soja por harina de Tenebrio molitor y de Acheta domesticus sobre los índices productivos y la calidad de carne de pollos de engorde de crecimiento lento, además de aplicar la metodología NIRS para intentar discriminar si se incluyó la harina de insectos en la dieta. En los dos primeros artículos se realizó una sustitución completa de la harina de soja por harina de Tenebrio molitor en el primer caso y por harina de Acheta domesticus en el segundo, para evaluar su efecto en el desarrollo de pollos de engorde de crecimiento lento (Coloryeld). Los animales se criaron desde el primer día de vida hasta los 95 días, de modo que la primera mitad del ensayo estuvieron en un alojamiento cerrado y posteriormente contaron con acceso al aire libre. En cada ensayo, un grupo estaba formado por 64 pollos machos divididos en 8 corrales de 8 pollos cada uno que recibió harina de soja como fuente proteica y el otro grupo recibió la harina de cada insecto respectivamente. Los grupos fueron alimentados con dietas isoproteicas e isoenergéticas empleando 3 raciones diferentes cada mes. En ambos casos, durante el primer mes la harina de insectos se tradujo en unos rendimientos productivos inferiores frente a la soja, con resultados similares para el segundo y tercer mes. Por tanto, puede recomendarse una sustitución parcial durante el primer periodo y usarse como sustituto completo a partir del segundo mes hasta el final del ciclo productivo. En el tercer artículo se evaluó el impacto de la incorporación de harina de Acheta domesticus frente la harina de soja en la dieta de dos estirpes de pollo de crecimiento lento sobre las características de la canal y la calidad de su carne. Para ello se utilizaron 256 pollitos machos de crecimiento lento de un día de vida, la mitad pertenecientes a la estirpe Roja y la otra mitad Cuello desnudo. Los pollos de cada estirpe se asignaron de forma aleatoria en 16 réplicas de 8 polluelos cada una. A su vez se asignaron 8 réplicas a 2 tratamientos distintos (n=64 pollitos/tratamiento) en función de la dieta empleada: los tratamientos de control tanto para la estirpe roja como para la cuello desnudo fueron alimentados con harina de soja, mientras que los otros 2 tratamientos fueron alimentados con harina de Acheta domesticus en ambas estirpes. La crianza se realizó al inicio en un alojamiento cerrado y al final de su ciclo tuvieron acceso al exterior. Los pollos fueron sacrificados a los 95 días de edad y se eligieron al azar ocho pollos por tratamiento para evaluar las características de la canal y la calidad de la carne. La inclusión de la harina de este insecto generó características de la canal menos favorables en ambos genotipos. Sin embargo, a pesar de las variaciones en el pH, las pérdidas por cocción, la humedad y el contenido de proteína cruda, la calidad general de la carne se mantuvo en niveles satisfactorios. El contenido de grasa mostró valores más bajos para los pollos cuello desnudo. En el cuarto trabajo se evaluaron los efectos de la harina de larva de Tenebrio molitor como sustitutivo parcial y/o completo de la harina de soja sobre la calidad de la canal y la carne en pollos de crecimiento lento. Un total de 256 pollos machos de un día (Coloryeld) se distribuyeron aleatoriamente en 32 unidades experimentales (8 pollos cada una). Estas unidades se distribuyeron uniformemente entre cuatro tratamientos (n=8): el tratamiento control (C) en el que la harina de soja fue la única fuente de proteína y tres tratamientos experimentales en los que la harina de soja se sustituyó por harina de larvas de Tenebrio molitor a niveles del 50%, 75% y 100% (T1, T2 y T3 respectivamente). Para cada tratamiento se utilizaron tres piensos diferentes según el periodo de crecimiento. Todos los pollos fueron sacrificados a los 92 días de edad, con 8 animales por tratamiento seleccionados aleatoriamente para evaluar la calidad de la canal y la carne. Los rasgos de la canal apenas mostraron diferencias entre tratamientos. El tratamiento T2 mostró una menor intensidad del color amarillo de la carne, mientras que el jugo exprimible y las pérdidas por cocción fueron menores en los tratamientos T1 y T2, ambos con menor fuerza de cizallamiento, mayor contenido de humedad y menores valores de proteína total en comparación con los tratamientos C y T3, siendo este último el de mayor contenido de cenizas. Los pollos que consumieron insectos presentaron niveles más altos de ácidos grasos monoinsaturados (MUFA) y más bajos de ácidos grasos poliinsaturados (PUFA) y (n-6) PUFA. En estos dos últimos trabajos se empleó la metodología NIRS para clasificar la carne en función del alimento y la cepa del pollito, logrando una correcta discriminación del 100% de las muestras. Las conclusiones que derivan de los estudios realizados determinan que las harinas de Tenebrio molitor y Acheta domesticus pueden ser una fuente proteica interesante para incluir en la dieta de pollitos de lento crecimiento como sustitución parcial de la harina de soja durante el primer mes de vida de las aves y como sustitución total a partir de ese momento hasta el final de su ciclo productivo. Además, proporciona características de calidad de la carne comparables a las obtenidas en sistemas convencionales.