Terror y placerhacia una (re)construcción cultural del mito del vampiro y su proyección sobre lo femenino en la literatuta escrita en lengua inglesa.

  1. Sánchez-Verdejo Pérez, Francisco Javier
Dirigée par:
  1. Antonio Ballesteros González Directeur/trice

Université de défendre: Universidad de Castilla-La Mancha

Fecha de defensa: 24 septembre 2004

Jury:
  1. Carmen Cecilia Piñero Gil President
  2. Beatriz González Moreno Secrétaire
  3. Manuel González de la Aleja Barberán Rapporteur
  4. Margarita Rigal Aragón Rapporteur
  5. Sara Martín Alegre Rapporteur

Type: Thèses

Résumé

Cuando en el Siglo XVIII irrumpe el género gótico en la literatura inglesa, de manera paralela a las críticas que va cosechando se produce un auge casi sin precedentes en un género literario de tal magnitud. Si desde ese mismo comienzo el motivo de una mujere joven -preferiblemente virgen- perseguida por un tirano va a prevalecer como característico de este género literario, el que el número mayoritario (en proporciones innimaginalbes hasta entonces) de lectores sea femenino no va sino a abonar el camino para la revolución femenina en ciernes. De este modo, la mujer se a ver vista refleja en las obras que ella misma devora con avidez espectral: esa que ha sido vilipendiada y denostada por el grueso de la sociedad -masculina y patriarcal - históricamente. Por tanto, dentro de todo este panorama, el género gótico es el vehículo idóneo por un lado para canalizar los más sublimes deseosos sexuales para con las mujeres pero es también la forma que se emplea para expresar la situación de las féminas. De sumisa a dominadora, de ser asexurado a ver vorazmente secual, la mujer será vista por el hombre como alguien capaz de las más sublimes sensciones pero también como el ser más poderoso y destructor en potencia (y en acto). Ante todo este conglomerado de visiones, que surja el arquetipo de la vampira no es nada extraño en absoluto, lo que es más, su aparición es lógica y justificable. Ella, la vampira, aúna en sí conceptos tan variados y tan opuestos como el de fémina, portadora de la muerte, un ser extremadamente erótico.