Simbolismo y motivos recurrentes en la obra de Jane Austen

  1. SANCHEZ REYES PEÑAMARIA, MARIA SONSOLES
Dirigida por:
  1. Francisco Cabezas Coca Director

Universidad de defensa: Universidad de Salamanca

Fecha de defensa: 21 de enero de 2000

Tribunal:
  1. Ramón López Ortega Presidente/a
  2. Román Álvarez Rodríguez Secretario
  3. María José Crespo Allué Vocal
  4. Antonio López Santos Vocal
  5. Inés Praga Terente Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 77003 DIALNET

Resumen

Un factor que explia la aparente similitud entre las obras de Jane Austen es la presencia de ciertos motivos recurrentes en todas ellas. La autora asocia invariablemente cada motivo con un significado o tema, común para varios motivos a la vez. Así, la distorisión de las coordenadas espacio-temporales por parte de un personaje advierte de su defecutosa moral y su intención velada de manipular la situación: la música, el baile, el asiento y la caza conllevanla idea de cortejo amoroso; el periódico, la ventana, el fuego y las vallas o setos marcan la tensión entre un ámbito doméstico de estrechez asfixiante y un mundo exterior que promete satisfacer unas ansias de libertad no permitidas socialmente; el absurdo, utilizado por Asuten hasta en diez tipos de contextos diferentes como airete para demoler los sin sentidos de su época, y que comparte esta función con la risa y los juegos de palabras, muchos de los cuales sólo se hacen evidentes en una lectura en voz alta: la maternidad, la soltería, los matrimonios mal avenidos y las urbes con motivos estigmatizados por la autoridad narrativa; y finalmente, los nombres de la ficción austeniana, que aportan información significativa para la compresión de la trama y de los personajes. El hecho de que un motivo recurrente se corresponda con un significado establecido posibilita el que el lector trascienda la denotación del elemento concreto y se centre en su con notación, proceso de abstración que se refuerza en lecturas sucesivas de la obra de Jane Austen acutalizando y adaptando el texo a sus propias experiencias sin variar su mensaje en una fascinante interacción que subyace a las entusiastas adehesiones a la obra de la novelista por parte de receptores de épocas y emplazamientos diversos.