La muerte en Gabriel Marcel

  1. Ramírez Agudelo, Yefrey Antonio
Dirigida por:
  1. Reynner Franco Rodríguez Director
  2. Julia Urabayen Pérez Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad de Salamanca

Fecha de defensa: 25 de enero de 2019

Tribunal:
  1. Franco Riva Presidente/a
  2. Luciano Espinosa Rubio Secretario
  3. Belén Blesa Aledo Vocal
Departamento:
  1. FILOSOFÍA, LÓGICA Y ESTÉTICA

Tipo: Tesis

Teseo: 581233 DIALNET

Resumen

La muerte es un tema que se desliza por toda la obra de Gabriel Marcel ya que se encuentra presente tanto en su producción dramática como en sus escritos filosóficos. Sin embargo, su presencia dista mucho de ser clara, pues se encuentra en variadas formas y en diversos sentidos. Este trabajo se preocupa, entonces, por aclarar los diferentes sentidos de la muerte en la obra marceliana, destacando la coherencia que hay entre ellos y poniendo de relieve su centralidad en el pensamiento de este autor francés. Para alcanzar estos objetivos se analizó primeramente las experiencias de la muerte que aparecen en la obra dramática. El análisis detallado que se realizó intentó respetar la autonomía del teatro, pero a la vez, su especial nexo con la filosofía. De entre los sentidos detectados sobresalen: la muerte existencial, la muerte como presencia del ser amado fallecido y la muerte como referente de interpretación. Este último engloba los dos anteriores y conecta con las reflexiones filosóficas de Marcel sobre la muerte, especialmente con la metaproblemática del no-ser-más, cuyo desarrollo es el propósito principal de la segunda sección dedicada a la obra filosófica. De hecho, la cuestión de la muerte está íntimamente unida al pensamiento filosófico de Marcel porque él escogió dedicarse a la filosofía debido a su inquietud por este tópico. La pregunta por la muerte lo acompañó desde temprana edad, por eso inquirió por la posibilidad de la inmortalidad, por la comunicación con los muertos, por la significación existencial de la presencia del ser amado fallecido y por la desesperación como muerte existencial. Desde esta perspectiva se puede notar en el pensamiento de este filósofo la tensión que existe entre la muerte como fascinación del no-ser y la exigencia ontológica como llamado a ser plenamente: la metaproblemática del no-ser-más. Esta dialéctica se encuentra en el fondo de su pensamiento y patentiza la coherencia entre todas sus reflexiones sobre la muerte, además, permite esclarecer sus ideas sobre el suicidio como un camino de la negación del ser, especialmente de sí mismo como ser intersubjetivo, y sobre el sacrificio como una vía de afirmación del ser por la apertura al tú. Esta importancia del tú para la propia vida ayuda a comprender por qué la muerte del amado es una cuestión capital en el pensamiento de este autor. En efecto, con la muerte del ser amado, la posibilidad de caer en la desesperación se acrecienta porque la ausencia parece imponerse sobre la presencia del ser querido fallecido. Así pues, Marcel emprendió un análisis profundo de la fidelidad, el amor y la esperanza buscando mantener la presencia en la ausencia como una promesa de inmortalidad.