Caracterización etiopatogénica de diferentes modelos experimentales de daño renal agudobiomarcadores, mecanismos fisiopatológicos y aplicaciones clínicas diagnósticas

  1. Blanco Gozalo, Víctor
Dirigida por:
  1. Francisco José López Hernández Director

Universidad de defensa: Universidad de Salamanca

Fecha de defensa: 20 de diciembre de 2017

Tribunal:
  1. Ana Isabel Morales Martín Presidenta
  2. Juan Antonio Moreno Gutiérrez Secretario/a
  3. Eduardo Tamayo Gómez Vocal
Departamento:
  1. FISIOLOGÍA Y FARMACOLOGÍA

Tipo: Tesis

Teseo: 526164 DIALNET

Resumen

El daño renal agudo (DRA) es un tipo de lesión de gravedad clínica en la que la función excretora renal se reduce súbitamente de forma que los riñones son incapaces de depurar adecuadamente la sangre de los fármacos, tóxicos y productos nocivos de desecho procedentes del metabolismo. Como consecuencia, la función de otros órganos y tejidos se ve seriamente comprometida, y con ella la vida del paciente. La detección precoz es un aspecto clave para el manejo clínico eficaz del DRA. Sin embargo, el diagnóstico de referencia presenta grandes limitaciones para detectar la disfunción renal de forma temprana, y para hacer un análisis etiopatológico de la causa y el tipo de daño subyacente. Concretamente, la eficacia de los análisis y técnicas utilizadas en la distinción entre el DRA de tipo pre-renal y el de tipo renal debe mejorarse sustancialmente. Por este motivo, se ha identificado, validado y desarrollado una nueva generación de marcadores capaces de detectar el DRA en sus fases iniciales. Algunos de estos marcadores tienen incluso cierta capacidad de discriminación etiopatológica, aunque individualmente no ofrecen una solución definitiva debido a su relativa falta de especificidad por el DRA. En este trabajo de investigación se ha caracterizado la etiopatología de diferentes tipos de DRA experimental, lo que nos ha permitido delinear una huella urinaria proteica específica de cada caso, que podría ser de utilidad en el diagnóstico diferencial de este síndrome. Además, el conocimiento de los mecanismos que conducen a la aparición de los marcadores urinarios puede dar una nueva visión al diagnóstico del DRA, en el que los biomarcadores con significado biológico pueden servir de biopsia líquida para realizar un diagnóstico fisiopatológico y personalizado más ajustado. En este sentido, nuestros resultados indican que NGAL y KIM-1 no son realmente marcadores de daño renal, como se pensaba, sino que son probablemente marcadores de reabsorción tubular defectuosa. Aunque estas dos condiciones pueden coexistir, no tienen necesariamente que hacerlo. Y puesto que sus consecuencias fisiopatológicas y clínicas pueden ser diferentes, distinguirlas desde el punto de vista diagnóstico constituye un avance interesante.