La tradición hispano-italiana moderna, la estética y Benedetto Croce
- Mombelli, Davide
- Pedro Aullón de Haro Zuzendaria
Defentsa unibertsitatea: Universitat d'Alacant / Universidad de Alicante
Fecha de defensa: 2019(e)ko iraila-(a)k 05
- Vicente González Martín Presidentea
- Francisco Chico-Rico Idazkaria
- Javier Pérez Bazo Kidea
Mota: Tesia
Laburpena
Objeto de la presente investigación de doctorado titulada "La Tradición hispano-italiana moderna, la Estética y Benedetto Croce" es el estudio de la relación hispano-italiana a partir del siglo XVIII. Delimitan el objeto de estudio dos momentos esenciales de la que se ha definido como “Tradición hispano-italiana moderna”, a saber, la Escuela Universalista Española, entidad extensa y pluralizada incluso a lo ancho del mundo cuyos resortes intelectuales y decisivas contribuciones actualmente tenemos la fortuna de encontrar trazados en su base más estricta, y Benedetto Croce, padre de la que se puede definir como “tradición o escuela hispanística italiana”. Los dos momentos, diferentes entre sí por localización, entidad y alcance, constituyen, el primero, la culminación de una tradición hispano-italiana de raíz renacentista, desarrollo barroco y continuación neoclásica; el segundo, la fase “crítica” de dicha tradición, consistente en el estudio y definición de los rasgos distintivos de la misma en un diferente marco intelectual o académico. La tesis, organizada mediante tres grandes secciones, se ocupa de ilustrar y definir los conceptos fundamentales de la Escuela Universalista Española (Parte I) en tanto hispano-italiana, así como el hispanismo de Croce (Parte II) y la recepción de la obra estética de éste en España e Hispanoamérica (Parte III). El marco disciplinar es el de la Estética y la Teoría del Arte, aunque se han considerado otros aspectos cuando se suscitan con pertinencia. El estudio de estos momentos clave de la relación hispano-italiana moderna ha permitido delinear una serie de conceptos y figuras decisivas. En cuanto al aspecto teórico, el concepto de “expresión” puede considerarse como elemento vertebrador de cierta teorización estética hispano-italiana, y ello debido al común trasfondo barroco, época decisiva para el desarrollo de la cultura mediterránea cuya trascendencia resultó formalizada, en su significación tanto positiva como negativa (culminación por contraste del anti-barroquismo), respectivamente por Eugenio D’Ors y Benedetto Croce. De ahí la importancia de dos autores: Baltasar Gracián y Giambattista Vico, ambos conceptualizadores de la categoría estético-retórica de “expresión”. Importante respecto de la teoría del concepto de expresión, es la obra musicológica del universalista Antonio Eximeno. También el enfoque historicista es un nexo de unión que confiere continuidad a la referida tradición hispano-italiana más allá de la diversidad de los planteamientos comentados en los respectivos capítulos (Vico, Andrés, Hervás, Croce). Se ha establecido también una topología esencial de la tradición hispano-italiana, siendo Nápoles, por diferentes razones y contingencias históricas y culturales, el topos decisivo de la tradición mediterránea específicamente hispano-italiana.