La reordenación de los saberes sociales y jurídicos en FranciaMoisei Ostrogorski y la École libre des sciences politiques (1871-1912)

  1. López Herraiz, Pedro Luis
Dirigida por:
  1. Marta María Lorente Sariñena Director/a
  2. Fernando Vallespín Oña Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 13 de diciembre de 2018

Tribunal:
  1. Joaquín Abellán García Presidente/a
  2. Elena García Guitián Secretario/a
  3. Manuel Martínez Neira Vocal
  4. António Manuel Hespanha Vocal
  5. María Paz Alonso Romero Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

RESUMEN Desde una perspectiva de historia del pensamiento político-jurídico y de historia de las ciencias sociales, esta tesis doctoral aborda el surgimiento de las ciencias políticas en Francia como disciplina que se construye en contraposición al derecho; disciplina, esta última, que durante el siglo XIX fue perdiendo su rol explicativo de la realidad social y política. Esta emergencia de las ciencias políticas se incardinaba en un proceso más amplio de reordenación de los saberes sociales y jurídicos que tuvo lugar en Francia en el paso del siglo XIX al XX, y que se concretó en la fundación en 1871 de la École libre des sciences politiques (ELSP) que institucionalizó la formación de las élites políticas y administrativas. Las ciencias políticas practicadas en la ELSP e inspiradas principalmente por Émile Boutmy e Hippolyte Taine se diferencian de la comprensión actual de la ciencia política. Formando parte de un proyecto patriótico de levantamiento de Francia tras la derrota en su guerra con Prusia, la ELSP se centró en la preparación de los concursos para la alta administración. Sin embargo, sus objetivos iban más allá de lo anterior: se buscaba un estudio histórico-crítico de los últimos fenómenos políticos y se proponía un método de estudio inductivo, en contraposición con lo que se consideraba que era el método deductivo y dogmático propio de los juristas y de los filósofos. Igualmente, en la ELSP se practicaba un método comparado centrado en el estudio del modelo político inglés y del experimento democrático americano, que recurría, para explicar los fenómenos políticos, a nociones como el “carácter nacional” y a marcos teóricos como el de la “psicología de los pueblos”. Enmarcados en un discurso cientificista, los estudios de la ELSP tenían también objetivos políticos: posicionarse desde una postura liberal-elitista ante los desafíos de la democracia y del sufragio universal en Francia. Uno de los autores que se ha considerado como padre de la ciencia política moderna, el ruso Moisei Ostrogorski, se formó en esta institución y extrajo de ella varios elementos que le permitieron llevar a cabo su conocido estudio sobre las organizaciones de partido en Inglaterra y Estados Unidos. Esta tesis doctoral muestra como la obra de Ostrogorski se enmarcaba principalmente en las preocupaciones políticas y académicas francesas, a pesar de que este dato haya sido generalmente ignorado. Su investigación, sin embargo, se diferenciaba en varios puntos de la comprensión de las ciencias políticas practicas en la ELSP, siendo precisamente estas diferencias las que le permitieron abordar el estudio de un objeto –los partidos de masas– que no recibió especial atención científica ni en la institución ni en otras disciplinas cercanas como la sociología durkheimiana o el derecho público, muy importantes en la Francia fin de siècle. El método de estudio de Ostrogorski se basaba en la observación rigurosa de un nuevo fenómeno político, lo que le valió que la ciencia política de la segunda mitad del siglo XX le considerase como un pionero. Sin embargo, su trabajo también se caracterizaba por una perspectiva histórica, por tener en cuenta elementos jurídicos y filosóficos, y por llevar a cabo una propuesta de reforma de la democracia. Además, en su época, fue leída con especial interés por posiciones críticas con la democracia parlamentaria desde la derecha y desde la izquierda. Mostrando estas otras facetas de Ostrogorski, es posible discutir la lectura genealógica y reduccionista realizada generalmente por parte de la ciencia política a partir del estudio seminal de Seymour M. Lipset. A través del estudio de estos dos objetos concretos –ELSP y Ostrogorski– esta tesis doctoral muestra la artificialidad de las divisiones disciplinares y la circularidad de la crítica cientificista en el campo de las ciencias sociales (es decir, la que se refiere a las debilidades científicas de los enfoques ajenos). Igualmente, concluye con un llamado al cuestionamiento de la rigidez de las fronteras disciplinares y con una reflexión sobre la necesidad de que las necesarias críticas al funcionamiento de las democracias representativas vayan acompañadas de una reflexión rigurosa sobre las alternativas