Vasco de la Zarza. Nuevos enfoques

Resumen

Esta tesis doctoral profundiza en el estudio de la figura y la obra de Vasco de la Zarza, destacado escultor y maestro de obras del primer cuarto del siglo XVI en España. Fue uno de los artistas pioneros en la introducción del Renacimiento en nuestro país, lo que le ha hecho merecedor de un importante puesto en la plástica castellana de principios del quinientos. En este trabajo presentamos los avances realizados en el conocimiento de su faceta profesional, que han permitido arrojar luz sobre aspectos como su proceso formativo -tanto en Castilla como en Italia-; su actividad en los primeros años del siglo XVI, que suponía una laguna de conocimiento entre la primera obra documentada en 1499 y la segunda en 1508; y sobre su taller y sistema de trabajo. Además, se ha definido y valorado la importancia que tuvo como maestro de obras. Asimismo, se han reconstruido algunos aspectos básicos sobre la economía familiar del artífice, las rentas, el nivel de vida, el valor de sus propiedades y su posición social. El estudio de la red de relaciones profesionales ha hecho posible descartar algunos artistas con los que se le había vinculado –como los italianos Tullio y Pietro Lombardo, o Domenico y Antonello Gagini- e incluir otros como Andrea Bregno, Mino da Fiesole, Desiderio da Settignano, Antonio Pollaiuolo, Matteo Civitali, Andrea Sansovino, la familia della Robbia, Juan Guas, Sebastián de Toledo, Pedro Berruguete, Alonso de Covarrubias o Martín de Solórzano. En muchos casos han abierto contactos hasta ahora desconocidos con otras escuelas y talleres. Por otra parte, hemos aportado nueva información sobre la biografía y la promoción artística de algunos de sus comitentes. Hemos profundizado en el vínculo de Alonso Carrillo –obispo de Ávila- con la Curia Pontificia, debido a su cargo de protonotario apostólico; así como con los Reyes Católicos, a quienes prestó su servicio. También se ha destacado su lazo de sangre con la familia Mendoza y ampliado el catálogo de su patronazgo artístico en la Capilla de san Ildefonso de la Catedral de Toledo, la Catedral de Ávila y la villa episcopal de Bonilla de la Sierra. Sobre el chantre de la catedral abulense Alonso Castrillo hemos determinado el grado de parentesco con la esposa de Zarza y hemos descubierto su relación con la Inquisición, así como su buena posición en la corte. Todo ello ha permitido reconsiderar la importancia de este personaje. Por otra parte, hemos recuperado algunos aspectos básicos sobre la biografía de Bernaldino Barrientos -señor de Serranos de la Torre- y se ha podido documentar que fue el constructor de la iglesia en la que se erigió su sepulcro, que podría haber sido concebida como panteón para su enterramiento. Además, hemos reconsiderado la relación artista-comitente entre Zarza y la virreina de Sicilia, María Dávila, que se había estudiado como una de las principales patronas del artista. Las obras artísticas atribuidas a su promoción fueron encargadas por Luisa de Acuña, abadesa del convento abulense de Las Gordillas, así como por Álvaro de Castro, capellán de Dávila. La revisión de su producción artística ha permitido descartar su participación en diversas obras que se le habían atribuido, como la decoración de la fachada del Hospital de Santa Cruz de Toledo, el altar de santa Librada de la Catedral de Sigüenza, la fachada rica de la Universidad de Salamanca o los sepulcros de Juana de Valencia y Pedro Hurtado de Mendoza, en la iglesia de San Ginés de Guadalajara. También hemos realizado nuevas atribuciones, como la decoración de las claves de las bóvedas de la capilla mayor y de la antigua librería de la Catedral de Ávila, y hemos identificado un conjunto de iglesias de la Diócesis de Ávila en las que podría haber intervenido, como la iglesia del convento de San Francisco de Ávila, las parroquias de Santa María del Arroyo y San Esteban del Valle, así como la portada de la iglesia de Villanueva de Gómez. Además, se ha revisado su participación en algunos proyectos, como el que realizó para el claustro principal del Monasterio de Guadalupe, el retablo mayor de la Catedral de Ávila o la reforma del claustro de dicho templo. Se ha llevado a cabo una clasificación y estudio de las diferentes tipologías de sepulcros, retablos y altares, y se ha puesto en valor la elevada capacidad creativa del artífice, así como su innovación en la aplicación de modelos del arte italiano. En este sentido podemos destacar los tabernacoli italianos que inspiraron el diseño del sagrario del retablo mayor de la Catedral de Ávila, el influjo de la escultura funeraria romana y los arcos de triunfo que se aprecia en algunos sepulcros o la asimilación de elementos y estructuras como los candelabros clásicos o las aras romanas, que incorporó en sus proyectos. Por otra parte, el análisis iconográfico y simbólico de sus obras nos ha llevado a identificar nuevos temas, corregir otros que no se habían leído correctamente y proponer una interpretación integral de proyectos artísticos de gran complejidad, como el monumento fúnebre de Alonso de Madrigal “El Tostado” o el de Alonso Carrillo, así como el sagrario del retablo mayor de la Catedral de Ávila, que se explican en el contexto devocional, sociológico y cultural en el que fueron creados. Se incluye un archivo fotográfico actualizado y completo de la producción artística de Zarza.